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Sanidad interior: ¿Quieres ser libre? Parte III

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Prédica de Hoy: Sanidad interior: ¿Quieres ser libre? Parte III

Mensajes Cristianos Texto Bíblico: Jeremías 33:6 He aquí yo les traeré sanidad y medicina; y los curaré, y les revelaré abundancia de paz y de verdad”.

Comienza una vida nueva en Cristo en libertad

Muchos pueden ser tus conflictos traumáticos, marcas, heridas, cicatrices que pueden haber marcado tu corazón como recuerdos, imágenes o vivencias dolorosas que han quedado guardadas y olvidadas en tu mente.

Causas traumáticas como, depresiones, ideas de muerte o suicidio, rechazo o dudas sobre la identidad sexual; falta de perdón, sentimientos de culpa ante Dios, situaciones de violencia vividas por tus padres o familiares cercanos; accidentes; pérdidas importantes no asumidas, como; la perdida de un ser querido, perdidas económicas como; robos, quiebra; cierre de negocios, o perdida de la fuente de trabajo etc. pero lo más importante es que Dios quiere sanar hoy todas tus dolencias y aflicciones.

A través de los mensajes cristianos y predicas cristianas aprendemos que Dios que es grande en amor y misericordia quiere sanar tu vida.

Lo primero que debes hacer es confrontarte con el problema que te ha causado esa herida tan profunda en tu corazón y reconocer con la ayuda del Espíritu Santo y con un consejero que puedas contar con su ayuda, que este lleno del poder de Dios con conocimiento y autoridad del Espíritu y si es necesario pedir ayuda a un facultativo para dar comienzo a esta Sanidad Interior que Dios quiere producir en tu vida para usarte para su gloria y para que puedas vivir una vida victoriosa.

Salmos 103 3:5El es quién perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias; El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias; El que sacia de bien tu boca. De modo que te rejuvenezcas como el águila”.

Hay quienes dicen que el tiempo es quién cura todas las heridas y sabemos que el tiempo puede apaciguar la ira, mitigar el dolor. Pero lo que el tiempo no podrá hacer es cicatrizar las heridas producidas por el trauma que has padecido.

Vemos entonces que hay heridas que no se pueden curar por si solas sin un tratamiento apropiado para su sanidad. Esas heridas son profundas, están infectadas. Muchas de ellas echan olor y sigue contaminando tu vida como una gangrena que avanza sin compasión.

A través de los mensajes cristianos y predicas cristianas aprendemos que si tu abres completamente tu corazón al obrar del Espíritu Santo aceptando la sanidad integra y total que Dios te ofrece, comenzarás a vivir una nueva vida en Cristo en libertad. Una vida sin dolor, marcas, sufrimientos, tormentos, amarguras, tristezas, sin la persecución de tu pasado que puede estar atormentando tu vida.

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