Estudios Bíblicos
Prédica de Hoy: Milagros de Jesús según el evangelio de Juan – Parte II
Estudio Bíblico Texto Bíblico: “Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. Pero estas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre” (Juan 20:30-31)
Introducción
En la primera parte de este estudio vimos los primeros tres milagros a los que el evangelio de Juan le da relevancia respecto a la vida de Jesús. En esta segunda parte veremos dos más de los milagros que relata el evangelio de Juan, para mostrar a quienes leemos que Jesús es el Hijo de Dios y por esa fe tengamos vida eterna.
El cuarto milagro que relata Juan es la alimentación de los cinco mil y el quinto es cuando Jesús camina sobre el mar. En ninguno de estos dos milagros existe una solución normal de la situaciones, sino que algo sobrenatural es necesario que pase para que esto sea una realidad.
Dios es el único que puede realizar este tipo de milagros. Por eso queda claro nuevamente que Jesucristo es Dios, pues si no fuera así estos milagros no pudieran ser.
En ambos milagros los testigos de los mismos reconocen, después de ver los milagros, que Jesucristo es Dios. De esta manera el escritor reconoce que registrar estos milagros se está cumpliendo con el propósito por el cual está registrando estos milagros maravillosos.
Si Jesús no fuera el Cristo, estos milagros no hubieran podido ser hechos, pero como Él es el Hijo de Dios, el poder de Dios es manifestado en forma de alimentar a cinco mil con poca comida y en caminar sobre las aguas.
4) Milagros de Jesús – Alimentación de los cinco mil (Juan 6:1-14)
Los milagros que Jesús había hecho hasta este punto se limitaba a unos pocos testigos, pero mucha gente comenzó a seguirle. ¿Cómo no seguir a aquel que habla con autoridad la verdad de Dios? ¿Cómo no seguir a aquel que hace milagros en el nombre del señor? Mucha gente le seguía por los milagros que hacía en los enfermos y como ellos recibían la sanidad.
En esta ocasión habían cinco mil hombres que le seguían. Según los estudiosos había también un número similar de mujeres y otro tanto de niños. Jesús les enseñaba, a este rebaño que estaban como quien no tiene pastor, estaba ansiosos por recibir palabra de Dios. Jesús le pregunta a uno de los discípulos de dónde sacarían comida para tanta gente.
Como en el milagro anterior Jesús hace una pregunta, pero Él sabe la respuesta. En esta ocasión la pregunta está dirigida a uno de los discípulos. Nuevamente la respuesta fue imposibilidades, pues mucho dinero era requerido para poder comprar para que, aunque sea un poco, todos comieran.
Pero Jesús sabía lo que debía hacer, sabía cómo el poder de Dios se manifestaría a esta gran multitud como un milagro más que quedó registrado para nuestro conocimiento.
